Mutinus elegans (Mont.) E. Fischer
Curiosamente desde Outeiro Punxín en la provincia de Orense, hasta La Guardia en la provincia de Pontevedra, siguiendo el curso de la ribera del río Miño; suponemos que sea debido al clima “casi subtropical”, sobre todo en la zona de Tomiño, Goían y el Rosal, ya dentro de la provincia de Pontevedra, se han encontrado varios Gasteromicetos de la familia Phallaceae, algunos muy curiosos como: Phallus impudicus v/ pseudoduplicatus, por Jorge Santoro; Mutinus elegans, por Lorena de Cascallar y Manuel Garea Castro ; Mutinus ravanelli y Clathrus cancellatus, por J. Formigo Abuín; Aseroe rubra, por Oscar Requejo; Clathrus archeri, por Juan Carlos Alonso y el más común de todos, como: Mutinus caninus y Phallus impudicus, por Alfonso Rey.
En este caso se trata del Mutinus elegans hallado por Lorena de Cascallar, y Manuel Castro Garea socios de la agrupación micológica “A Zarrota” de Vigo, Lorena en la zona de Arbo (Pontevedra), y por Manuel en la zona de Tui Pontevedra (Galicia), espécimen muy raro en Galicia y que detallamos a continuación:
Mutinus elegans (Mont.) E. Fischer 1888
Etimología: del latín elegans = elegante.
Sinónimos: Caromysa elegans Mont. 1856
Corynites curtisii Berk 1873 = M. Curtisii, (Berk) E. Fischer 1.888
Notas tasonómicas.
La Susodicha sinonomía es reconducida por Coker & Couch bajo M. Curtisii, pero la prioridad nomenclantural corresponde al epíteto elegans.
Datos ambientales.
Hábitat: preferiblemente de sotillos raros, húmedos y ricos en detritos leñosos, en parques, en jardines, a lo largo de las avenidas de la ciudad o en otros lugares modificados por el hombre; generalmente en llano o en colinas bajas. De primavera tardía al otoño.
Difusión: es especie bastante rara, originaría de Norte América, pero aparentemente en fase de expansión en las regiones meridionales de Europa.
Dispersión de las esporas: como todas las Phallaceae, es obra de las moscas y otros insectos que de alimentan de la gleba a mucilaginosa.
Descripción:
Los carpoforos jóvenes inicialmente toman la forma aovada-alargada, de 2-3 cm. de diámetro, integrados en el sustrato con cordoncillos rizomorfos blanquecinos o blancos- rosados; de adultos abiertos con peridio-volva basal, del que emerge un robusto receptáculo rojizo y subcilíndrico, delicado de 7-10 cm; a veces de 12-15 cm.
Peridio subdividido en tres capas funcionales: esoperidio típicamente de color blanco-rosa o rosa-morado, a veces marrón-ciclamino, con superficie lisa o verrugosa-agrietada; mesoperidio traslúcido y gelatinoso, a menudo de 2-3 cm, debilitado después de la laceración del peridio-volva y la elongación del receptáculo; endoperidio blanquecino, sutil y delicado, membranoso como en Mutinus caninus, conectado bajo la porción de la base y unido en la cumbre al borde la perforación apical del receptáculo, siempre muy adherente a la gleba y al receptáculo mismo, deshilachado y casi borroso, en los adultos difícilmente verificables dentro del peridio-volva.
Dehiscencia causada por el receptáculo, durante su vistosa elongación hacia lo alto, a través de la laceración de la cresta del peridio-volva.
Gleba inicialmente en forma de”C” volcado bajo los embriones, como en Mutinus caninus, en la maduración pringoso directamente sobre el receptáculo, en la zona apical y ahusada, 1-2 cm. de grueso, de color verde oscuro, a veces revestida por delgadas capas sutiles y borrosas, blancas, cuales restos del endoperidio, con un característico olor fétido, mezclado a un fuerte componente dulce y punzante.
Receptáculo bastante robusto d 1-2 cm. de ancho, fusiforme en la parte alta, muy ahusado, hueco, generalmente perforado en el ápice de modo tal de permitir una comunicación entre la gelatina interior del peridio como el Mutinus caninus, libre y extirpable, sencillamente apoyado sobre soporte algodonoso; con pared de 2-3 cm de espesor, formado por capas articuladas abiertas hacía el interior, pero comúnmente hacía el exterior y ligeramente combadas y prominentes, permitiendo un aspecto rugoso, a veces incitado hacía la base; completamente pintado de rojo tanto en el interior como en el exterior. Con tonos gradualmente variables en la base hasta un rojo intenso bajo la gleba, sin evidenciar un neto cambio de color, estructura pseudoparenquimática constituida por elementos globosos-elipsoidales de hasta 30.65 µm., con pared sutil de hasta 1 mm.
Esporas de color verde claro o casi hialino, con superficie lisa, muy pequeñas, elipsoidales o subcilíndricas de 3,5-4,0-4,2-5 x 2,3-2,5 µm.
Caracteres diferenciales:
Con respecto al Mutinus caninus la característica diferencial más evidente es la coloración del peridio-volva y sobre todo del receptáculo, completamente con tonalidades rosáceas-rojizas sobre toda la superficie, tanto interior como exterior. Además, el receptáculo generalmente se presenta más robusto y delgado-esbelto que en Mutinus caninus, y tiene un olor característico e inconfundible, con un fuerte componente dulzón mezclado con el fétido.
Bibliografía: Gasteromiceti epigei de Mario Sarasini
Foto: Manuel Garea Castro.
Traducción: Alfonso Rey Pazos
Fecha: 19-02-1910
Curiosamente desde Outeiro Punxín en la provincia de Orense, hasta La Guardia en la provincia de Pontevedra, siguiendo el curso de la ribera del río Miño; suponemos que sea debido al clima “casi subtropical”, sobre todo en la zona de Tomiño, Goían y el Rosal, ya dentro de la provincia de Pontevedra, se han encontrado varios Gasteromicetos de la familia Phallaceae, algunos muy curiosos como: Phallus impudicus v/ pseudoduplicatus, por Jorge Santoro; Mutinus elegans, por Lorena de Cascallar y Manuel Garea Castro ; Mutinus ravanelli y Clathrus cancellatus, por J. Formigo Abuín; Aseroe rubra, por Oscar Requejo; Clathrus archeri, por Juan Carlos Alonso y el más común de todos, como: Mutinus caninus y Phallus impudicus, por Alfonso Rey.
En este caso se trata del Mutinus elegans hallado por Lorena de Cascallar, y Manuel Castro Garea socios de la agrupación micológica “A Zarrota” de Vigo, Lorena en la zona de Arbo (Pontevedra), y por Manuel en la zona de Tui Pontevedra (Galicia), espécimen muy raro en Galicia y que detallamos a continuación:
Mutinus elegans (Mont.) E. Fischer 1888
Etimología: del latín elegans = elegante.
Sinónimos: Caromysa elegans Mont. 1856
Corynites curtisii Berk 1873 = M. Curtisii, (Berk) E. Fischer 1.888
Notas tasonómicas.
La Susodicha sinonomía es reconducida por Coker & Couch bajo M. Curtisii, pero la prioridad nomenclantural corresponde al epíteto elegans.
Datos ambientales.
Hábitat: preferiblemente de sotillos raros, húmedos y ricos en detritos leñosos, en parques, en jardines, a lo largo de las avenidas de la ciudad o en otros lugares modificados por el hombre; generalmente en llano o en colinas bajas. De primavera tardía al otoño.
Difusión: es especie bastante rara, originaría de Norte América, pero aparentemente en fase de expansión en las regiones meridionales de Europa.
Dispersión de las esporas: como todas las Phallaceae, es obra de las moscas y otros insectos que de alimentan de la gleba a mucilaginosa.
Descripción:
Los carpoforos jóvenes inicialmente toman la forma aovada-alargada, de 2-3 cm. de diámetro, integrados en el sustrato con cordoncillos rizomorfos blanquecinos o blancos- rosados; de adultos abiertos con peridio-volva basal, del que emerge un robusto receptáculo rojizo y subcilíndrico, delicado de 7-10 cm; a veces de 12-15 cm.
Peridio subdividido en tres capas funcionales: esoperidio típicamente de color blanco-rosa o rosa-morado, a veces marrón-ciclamino, con superficie lisa o verrugosa-agrietada; mesoperidio traslúcido y gelatinoso, a menudo de 2-3 cm, debilitado después de la laceración del peridio-volva y la elongación del receptáculo; endoperidio blanquecino, sutil y delicado, membranoso como en Mutinus caninus, conectado bajo la porción de la base y unido en la cumbre al borde la perforación apical del receptáculo, siempre muy adherente a la gleba y al receptáculo mismo, deshilachado y casi borroso, en los adultos difícilmente verificables dentro del peridio-volva.
Dehiscencia causada por el receptáculo, durante su vistosa elongación hacia lo alto, a través de la laceración de la cresta del peridio-volva.
Gleba inicialmente en forma de”C” volcado bajo los embriones, como en Mutinus caninus, en la maduración pringoso directamente sobre el receptáculo, en la zona apical y ahusada, 1-2 cm. de grueso, de color verde oscuro, a veces revestida por delgadas capas sutiles y borrosas, blancas, cuales restos del endoperidio, con un característico olor fétido, mezclado a un fuerte componente dulce y punzante.
Receptáculo bastante robusto d 1-2 cm. de ancho, fusiforme en la parte alta, muy ahusado, hueco, generalmente perforado en el ápice de modo tal de permitir una comunicación entre la gelatina interior del peridio como el Mutinus caninus, libre y extirpable, sencillamente apoyado sobre soporte algodonoso; con pared de 2-3 cm de espesor, formado por capas articuladas abiertas hacía el interior, pero comúnmente hacía el exterior y ligeramente combadas y prominentes, permitiendo un aspecto rugoso, a veces incitado hacía la base; completamente pintado de rojo tanto en el interior como en el exterior. Con tonos gradualmente variables en la base hasta un rojo intenso bajo la gleba, sin evidenciar un neto cambio de color, estructura pseudoparenquimática constituida por elementos globosos-elipsoidales de hasta 30.65 µm., con pared sutil de hasta 1 mm.
Esporas de color verde claro o casi hialino, con superficie lisa, muy pequeñas, elipsoidales o subcilíndricas de 3,5-4,0-4,2-5 x 2,3-2,5 µm.
Caracteres diferenciales:
Con respecto al Mutinus caninus la característica diferencial más evidente es la coloración del peridio-volva y sobre todo del receptáculo, completamente con tonalidades rosáceas-rojizas sobre toda la superficie, tanto interior como exterior. Además, el receptáculo generalmente se presenta más robusto y delgado-esbelto que en Mutinus caninus, y tiene un olor característico e inconfundible, con un fuerte componente dulzón mezclado con el fétido.
Confusión posible:
Con Mutinus caninus (Huds.) Fr., Mutinus curtisii (Berk.) E. Fischer, Mutinus bambusinus (Zoll.) E. Fischer.
Bibliografía: Gasteromiceti epigei de Mario Sarasini
Foto: Manuel Garea Castro.
Traducción: Alfonso Rey Pazos
Fecha: 19-02-1910
Otro de esos en mi casa de Patos-Nigran
ResponderEliminarEn mi jardín en Baiona salen de 5 en 5 en cuestión de horas, y en más de 25 años que llevo viviendo aquí jamás los había visto
ResponderEliminarEn mi jardín que es de gramon llevan saliendo varios años
ResponderEliminarA mi en Gondomar me salen desde hace dos años bajo el gramon, entre octubre y diciembre.
ResponderEliminarHoy me encontré con 4 de estos en el gramon en Gondomar , gracias a Google lens di con esta publicación pues no sabía ni cómo buscar información 😝
ResponderEliminarEn Bora, Pontevedra tb los he encontrado. Cinco o seis, en un prado verde, y aún húmedo. Alejado de árboles
EliminarMi casa en Tomiño. Nos están saliendo muchísimos en un jardín que es parte de gramón y césped. Menos mal que existe Google lens. Ni idea de lo que era. ¿Cómo se erradica esto?
ResponderEliminarYo vivo en Mos y es la primera vez que aparecen en mi jardín
ResponderEliminarMe nació uno en el jardin
ResponderEliminarEn Pontevedra, parroquia de Campaño tan bien jardin de gramon. Es la primer avez que nos salen
ResponderEliminarYo tenia bastantes, este año le esparcí fungicida de cobre mezclado con arena y regé bien. Ahora me sale alguno de tarde en tarde, no sé si será casualidad.
ResponderEliminarDe todos modos cuando llega el frío dejan de salir, hasta el próximo otoño.